Andrea Barandica Martínez
Este
encuentro estuvo dividido en tres grandes momentos. El primero de estos fue la
clase sincrónica donde se trató el capítulo del libro de Coll y se resolvieron
dudas que cada uno de nosotros pudo tener. El segundo fue leer uno de los
apartados del capítulo y en grupos aleatorios escoger uno de ellos y definir si
era un horizonte o supuesto. Y un tercer y último momento, consistió en una
pequeña exposición al resto del curso acerca de las conclusiones a las que
habíamos llegado. Además, se dejó una actividad en la plataforma empleada la
clase pasada, donde a través de videos, lecturas y completar, selección
múltiple y match, se reforzó lo tratado en clase.
El
tema macro fueron las tensiones existentes debido a la diversidad de maneras de
entender la psicología de la educación, pero se hizo mayor énfasis en la
tensión sobre la dependencia o independencia de la psicología educativa
respecto a la psicología en general, que se diferencian a partir de la libertad
para definir un objeto y el método de trabajo. En consecuencia, existen 2
planteamientos contrastados:
1. La psicología de
la educación entendida como una psicología aplicada a la educación. Esta visión
unidireccional que va de la psicología a la educación, afirma que la piscología
es el único conocimiento que permite abordar cualquier problema o situación educativa
y, por lo tanto, esta no se distingue de cualquier otro campo de aplicación. Por
otro lado, sostiene que existen leyes universales para el comportamiento, y la
principal tarea de este campo de aplicación es seleccionar entre los
conocimientos que ofrece la psicología general los que más le convienen para
explicar los comportamientos en el entorno educativo. Por lo tanto, esta
psicología de la educación no tiene un objeto de estudio propio ni busca
generar conocimientos nuevos.
2. La psicología
educativa vista como disciplina puente entre la psicología y educación. Esta
visión bidireccional, de interdependencia, donde se afectan mutuamente ambas
disciplinas, presenta un abordaje de los problemas educativos multidisciplinar.
Además, debe tenerse en cuenta el contexto y sus características propias para
poder estudiar el comportamiento en dichos entornos educativos. La principal
tarea de la psicología de la educación es la elaboración de metodologías y teorías,
por lo tanto, genera conocimientos nuevos y específicos, y tiene un objeto de
estudio propio.
De
modo que, me identifico con la segunda visión debido a que ayuda a combatir ese
reduccionismo y nos permite generar conocimientos y tratamientos
contextualizados, teniendo una visión más amplia y un abordaje mucho más
eficaz. También es importante señalar que sin importar la visión que se adopte,
la psicología de la educación comporta siempre que alguien enseña algo a
alguien en un contexto institucional con un propósito y esperando unos
resultados que son a menudo evaluados.
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